Xenia de Gutierrez - “Depende de quien son las manos “


Un día Marta se acercó a su madre Lucia buscando consuelo ya que todo su día había sido desastroso, por la mañana en sus estudios había salido muy mal y en su trabajo, su jefe esta muy molesto porque los negocios estaban bajando y recargo todo el peso sobre Marta, luego de camino a casa su alguien había golpeado su auto y se había retirado sin responder por su falta; Marta estaba desesperada no sabia que hacer:
Lucia le dijo ¡¡Hija mía te demostrare como nuestras preocupaciones poniéndolas en las manos de Dios son diferentes, a lo que Marta le contesto, ¿como madre?  Te pondré un par de ejemplos para que veas que todo depende “de quien sean las manos”
Una pelota de basketball en mis manos vale 19 dólares
En las manos de Michael Jordan vale 33 millones de dólares

Una pelota de baseball en mis manos vale 6 dólares
En las manos de Marck McGuire vale 19 millones de dólares

Una vara en mis manos podrá ahuyentar a una fiera salvaje
En las manos de Moisés hará que las aguas del mar se separen

Una honda en mis manos es tan solo un juguete
En las manos de David es un arma potente

Dos peces y cinco piezas de pan en mis manos son unos emparedados
En las manos de Jesús alimentarán a una multitud

Unos clavos en mis manos serán suficientes para construir una silla
En las manos de Jesucristo traerán salvación al mundo entero

Como podrás ver, todo tiene significado diferente si cambia de manos  así que, coloca tus aflicciones, tus preocupaciones, tus temores, tus anhelos, tus sueños, a tu familia y a tus relaciones personales, en las manos de Dios, Porque todo en sus manos y con la fe puesta en el es menos pesado.
En san Lucas 7.1-10 podemos ver como el official Romano, que tenía enfermo y a punto de morir a un criado muy querido, solo le vasto con decir: “Señor, no te molestes, porque yo no soy digno de que tú entres en mi casa; por eso ni siquiera me atreví a ir personalmente a verte. Basta con que digas una sola palabra y mi criado quedará sano. Porque yo, aunque soy un subalterno, tengo soldados bajo mis órdenes y le digo a uno: ‘¡Ve!’, y va; a otro: ‘¡Ven!’, y viene; y a mi criado: ‘¡Haz esto!’, y lo hace”. Jesus quedo lleno de admiracion al ver la fe de aquel official y cuando este llego a ver a su criado el ya habia sanado.
 
 POR: Xenia de Gutierrez
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